La Unión Europea fue una de las mejores ideas del siglo XX. Hizo nuestro universo un poco más grande, más libre, y más diverso. También nos dio acceso a uno de los mercados más grandes en la actualidad por número de consumidores, multiplicando exponencialmente las posibilidades de crecimiento de nuestro negocio.
Sin embargo, diferentes países de la Unión Europea se han adaptado al cambio a diferentes velocidades. Algunos países, desgraciadamente, a pesar de poder disfrutar de todas las ventajas de estar en el mercado común, viven de espaldas a Europa.
¿Qué es la discriminación de IBAN, cómo afecta a tu negocio, y cómo puedes luchar contra ella?
¿Qué es la discriminación de IBAN?
Es un fenómeno más común de lo que parece, especialmente en algunos países, y especialmente si tienes una cuenta con un IBAN extranjero. Supongamos que tienes una cuenta en una fintech tipo Revolut o N26. Tras alquilar una casa en una nueva ciudad, vas a la oficina de servicio de luz, agua, o calefacción, y tratas de domiciliar el pago con el IBAN de tu cuenta de Lituania, Alemania o Estonia. La señora que te atiende, muy amablemente, te mira como si vinieras de otro sistema planetario y te dice que necesita que le des una cuenta «normal» .
En la mayoría de casos, empresas de servicios, incluso las más importantes, agua, luz, teléfono, calefacción, y por supuesto la mayoría de instituciones, desde ayuntamientos al Ministerio de Justicia, pueden llegar a afirmar que no son capaces de que les pagues por esos servicios si no tienes una cuenta bancaria en un banco local.
Hay que entender que desde 2014 esto no es verdad. Como miembros de la Unión, nuestras cuentas bancarias con IBAN Europeo son tan válidas como cualquier otra cuenta bancaria del país donde te encuentras.
¿Cómo afecta a tu negocio?
Esta discriminación es especialmente molesta cuando afecta a tu negocio. Bien sea porque quieres domiciliar pagos por servicios temporales (como la cuota de un coworking) o de pagos concretos (como el pago de material de oficina, un portátil nuevo o un móvil para uno de tus empleados), siempre conlleva situaciones desagradables, y la disyuntiva de si abrirse una cuenta bancaria en el país solo para dichos trámites.
Dicha decisión no es ideal desde el punto de vista administrativo, siempre conlleva papeleo, burocracia, y problemas.
Pero, las buenas noticias es que no es de hecho legal. Vamos a verlo y explicar qué puedes hacer si te encuentras en dicho caso, personalmente, o con tu empresa en Estonia.
¿Es legal la discriminación de IBAN?
No. No lo es. En 2014, todos los pagos de IBAN Europeo a IBAN Europeo se harmonizaron cuando el IBAN se convertió en el identificador estándar de todas las cuentas bancarias de la zona SEPA (Single European Payment Area).
Eso significa que esa empresa, negocio o institución que afirma que no puede aceptar tu IBAN, está cometiendo una ilegalidad. Sea porque su sistema informático nunca se pensó para Europa, o simple desprecio al mercado común Europeo, tienen la obligación de aceptar tu cuenta bancaria.
¿Qué podemos hacer?
Nuestra recomendación es la siguiente:
- Infórmales que están obligados a aceptar el IBAN de cualquier otro país SEPA. Aquí tienes el artículo de la Regulación Europea SEPA.
- Solicita la hoja de reclamaciones o eleva una queja formal y escrita.
- Si no recibes una respuesta satisfactoria a tu queja, puedes informar de una violación de la ley a la autoridad competente (ya sea la del país en el que estás, o la de Estonia).
- Por último, hay empresas que se dedican a reclamar y perseguir dichas discriminaciones. Puedes contratar los servicios de una.
Conclusión
Aunque pueda sonar extraño, la discriminación de IBAN es una práctica ilegal que ocurre más a menudo de lo que debería todavía en muchos países de la Unión Europea. En este artículo hablamos de qué es, cómo te afecta, y cómo luchar contra ella.